Un ser enigmático y demasiado concreto a la vez. Y así lo deja entrever Manuel Vicuña, el autor de ?Un juez en los infiernos?, libro recién publicado por Ediciones Universidad Diego Portales. Biografía de quien estaba obsesionado con la muerte (un capitulo del libro se llama ?Pasión necrofílica?), y no perdía la oportunidad de visitar cementerios en sus viajes, más que instalarse a observar a los seres que llenan las plazas públicas.
Un hombre dedicado a la historia -nació en 1831-, que vivió 55 años, y que al momento de su muerte estaba en su biblioteca. El mismo que podía pasar cinco horas por día metido en la Biblioteca Nacional leyendo todo lo que tenía que ver con la historia de Chile.